JOYAS DE ORO 18 KILATES PARA TODA LA VIDA
Nuestra exclusiva colección de joyas de oro de 18K tiene un valor y una personalidad única. Cada pieza ha sido diseñada y elaborada con la mejor calidad.
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La colección de oro 18kilates está formada por cadenas, anillos, pulseras y pendientes. Para darle un toque más único, algunas de las piezas llevan piedras como: piedra luna, circonita, ópalo y turquesa…
ELEGANTE, ÚNICA Y ETERNA: COLECCIÓN ORO 18 QUILATES
Como todos sabéis, el oro es uno de los metales más apreciados, y sin duda el más usado para fabricar joyas en todo el mundo.
Cada pieza tiene su personalidad, pero mantiene la esencia y estilo. Todas las joyas están hechas a mano con el mismo cariño y cuidado de siempre. ¡Deja huella!
Quilates, milésimas, leyes, aleaciones… en el mundo de la joyería se emplean términos específicos que a veces pueden resultar un poco confusos.
En realidad, todo se reduce únicamente a dos parámetros que debemos tener en cuenta:
- la pureza del oro
- el tipo de aleación
La pureza:
La pureza del oro se expresa, generalmente, en kilates (k).
Estos kilates no deben confundirse con los quilates (ct), utilizados para medir el peso de las piedras preciosas, y que es una unidad de medida totalmente diferente.
Tradicionalmente en España se han usado en joyería dos tipos regulados por ley: el de 18k y el de 14k, denominados respectivamente oro de primera y de segunda ley.
A veces se utiliza también el término “oro bajo” para referirse a cualquier pureza de oro por debajo de los 18k, sea de 14k o inferior.
Aunque esta terminología ya no es vigente hoy en día, se sigue utilizando aún con frecuencia.
En la actualidad, lo más frecuente es expresar la pureza en kilates o en milésimas.
- El oro puro, de 24k, no se emplea habitualmente en joyería, por no tener una consistencia adecuada para trabajarlo. Sí es algo más habitual en algunos países como La India.
- El oro de 18k y el de 14k se emplean ampliamente en joyería, debiendo especificarse siempre de cuál de los dos se trata, ya que la diferencia de precio es bastante notable.
- El oro de 9k tiene un porcentaje de oro muy bajo, bastante menos de la mitad de su composición es oro. Puede producir alergias, puede oxidarse , y se considera en general de baja calidad. De hecho, el oro de 9k no puede comercializarse legalmente como “oro” en algunos países, como EEUU.
En España, sin embargo, sí es legal su comercialización, siempre y cuando se indique claramente su grado de pureza.
La aleación:
El oro puro (24k) es amarillo, siempre.
Es al mezclarlo con otros metales (para conseguir oro de 18k, 14k, u otros), cuando puede cambiarse su color. A esta mezcla de metales se le denomina aleación.
¿Por qué alear el oro?
Hay diversos motivos para hacerlo:
- Conseguir mayor dureza del metal (el oro de 24k es blando y difícil de trabajar)
- Conseguir variar la gama de colores
- Reducir el coste
Los metales que pueden usarse para mezclar con el oro son muy variados, cada uno con diferentes propiedades, y según resultado final deseado escogeremos unos u otros.
A menudo, cada fabricante utiliza sus propias aleaciones y casi nunca se especifica qué metales contienen. Eso sí, siempre deben contener como mínimo el porcentaje de oro requerido para los quilates con los que se comercialice. Es decir, para 18k podemos usar hasta un máximo de un 25% de otros metales. Pero dentro de ese 25%, la composición y las proporciones pueden variar según el fabricante.
En general, para oro de 18k los colores son más sutiles que para oros de kilatajes más bajos. Esto se debe a que el oro de 18k (de cualquier color) contiene un 75% de oro puro, y el oro puro es siempre amarillo, con lo que los colores de oro de 18k (incluso el blanco) van a tener siempre una tonalidad amarillenta.
Para oro de 14k, ya pasamos a un 58% de oro puro, con lo cual tenemos un 42% de metal que podemos añadir para modificar el color, pudiéndose conseguir colores bastante más intensos.